Hemos tenido la inmensa suerte de este 2020 adelantar las vacaciones a enero, antes de la locura del confinamiento, la cuarentena y estos tiempos difíciles que nos han tocado vivir, que nos han obligado a parar en seco y en los que he podido aprovechar para hacer lo que más me gusta, escribir y leer.

Arrancábamos el 2020 con una ganas inmensas de vacaciones de playa, de mojito, chiringuito y hamaca, unas vacaciones de resort donde descansar y olvidarnos del mundo, queríamos resarcirnos de nuestro anterior viaje, Japón, donde no habíamos podido disfrutar de la playa.

Pero una vez decidimos el destino, una vez teníamos claro que queríamos descansar en las playas de México, una vez comenzamos a descubrir el país, teníamos claro que no podíamos quedarnos en un resort, que necesitábamos conocer y recorrer el estado de Quintana Roo en coche y a nuestro aire y eso hicimos.

Preparamos el viaje con una semana de antelación, comprar billetes, reservar hoteles, definir itinerario… este ha sido sin duda el viaje más improvisado y menos planeado de nuestra vida ¿Empezamos?

Día 1: Llegamos a Cancún

Día 2: Chichén Itzá, cenote Ik kil, Valladolid, Tulum

Día 3: Ruinas de Tulum, ruinas de Muyil, laguna Kaan Luum y cenote corazón.

Día 4: Tulum, Cobá, Cenote Choo-Ha, Cenote Tankach-Ha, Holbox

Día 5: Holbox

Día 6: Holbox

Día 7: De Holbox a Isla Mujeres

Día 8: Isla Mujeres

Día 9: Isla Mujeres

Día 10: Hasta siempre México lindo y querido